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jueves, 20 de enero de 2011

Ley de dependencia

Retos de la ley de dependencia para el 2011

Foto por: mcohen.chromiste
Según el calendario de aplicación de la Ley de la Dependencia este año debe incluirse en la cobertura a las personas valoradas con un Grado I de dependencia moderada, nivel 2. Así las cosas, los principales retos del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) serán mejorar el sistema de gestión de solicitudes e incentivar el servicio de "promoción a la autonomía". Deben mejorarse los tiempos de tramitación y agilizar la entrega de prestaciones para 231.055 beneficiarios con solicitud aprobada y con derecho a prestación que al 01-01-2011 no recibían ninguna ayuda.



Después de 3 años de aplicación de la Ley de la Dependencia en España el perfil de beneficiario conserva la tendencia: mujer de 65 o más años que vive sola o con un familiar cuidador. Sobre el total de solicitudes el 64% son mujeres, el 35% son hombres, y el 79% tiene más de 65 años. Durante el 2010 las solicitudes aumentaron casi el doble respecto al periodo anterior(119.632 en 2010 frente a 61.000 de 2009) y la gestión mejoró, sin embargo, aún hay mucho trabajo que realizar. Por ejemplo, el retraso en la entrega mensual del apoyo económico sigue siendo fuente de continuos reclamos.
Al realizar un balance general de la Ley de la Dependencia desde enero de 2007 encontramos dos grupos de información que exponen cómo ha sido su desarrollo y aplicación. Por una parte está la información sobre las solicitudes vigentes, y por otra, están los datos históricos (los cuales incluyen el número de solicitudes de beneficiarios que han fallecido desde 2007). De la información brindada por el SAAD podemos resumir lo siguiente:

Datos desde 01-01-2007 hasta 01-01-2011
VigenteHistórico
1.500.152 solicitudes1.783.047 solicitudes
1.377.853 dictámenes1.617.743 dictámenes
899.633 personas actualmente tienen derecho a prestaciones1.109.426 personas han tenido derecho a prestaciones
668.578 personas actualmente reciben prestaciones948.019 personas han recibido prestaciones


Durante el año pasado el Ministerio de Sanidad y Política Social y las Consejerías invirtieron en la adaptación de los servicios sociales y, sobre todo, en un nuevo sistema informático de gestión, lo cual mejoró la atención a los solicitantes y beneficiarios. No obstante, aún hay una diferencia importante entre "tener derecho a las prestaciones" y "recibir las prestaciones". Esto quiere decir que actualmente hay 231.055 beneficiarios (todos de Grado II y Grado III) que pese a tener un dictamen aprobado, aún no reciben las ayudas económicas y demás prestaciones. Aproximadamente uno de cada tres. En este sentido, se aprecia que el sistema tendrá que seguir mejorando su sistema de gestión para darle continuidad al compromiso expresado por el Ministerio. Los esfuerzos tendrán que mantenerse o crecer, más aún si consideramos que al incluir el grado I nivel 2 de dependencia moderada la ley dará cobertura a un rango más amplio de la población y por lo tanto las solicitudes seguirán aumentando. Es importante considerar que este grado expresa una valoración de autonomía relativa y menor riesgo según el baremo oficial, razón por la cual después del periodo 2011 - 2012 sólo se ampliará la cobertura al grado I nivel 1, el cual expresa la menor valoración de dependencia. Debido a la relativa autonomía que expresa el grado I y porque está en el límite entre lo que se define como "dependencia" y "autonomía", una de las dificultades que encontraremos durante los siguientes años será calcular la dependenciaacertadamente. Es decir, es posible que el número de dictámenes con respuesta no favorable aumente.
Los servicios y prestaciones de la Ley de Dependencia tienen ciertas precisiones para el Grado I. Los servicios que le corresponden son: Promoción de la autonomía personal, TeleasistenciaAyuda a domicilio yCentro de día y de noche. Las prestaciones económicas que se definen para este grado son sólo para cuidadores en el entorno familiar y la vinculada al servicio. Esta última prestación fue acordada en el último Consejo Territorial y es de 180 euros al mes, y la mínima, de 60 euros. En un principio se había planteado que las prestaciones económicas serían excepcionales y que los otros servicios dominarían la asistencia brindada por la ley. No obstante, ha ocurrido que hasta el día de hoy cerca del 50% de las prestaciones que concede la ley ha sido económica .En consecuencia, se han establecido varias restricciones para conceder prestaciones económicas en el entorno familiar; ahora se debe cumplir lo siguiente:
  • Que el beneficiario ya esté siendo cuidado en entorno familiar antes de solicitar la ayuda y que en su población o entorno no haya un servicio público o privado capaz de brindar el mismo nivel de cuidado.
  • Que el cuidador conviva con el beneficiario en el mismo domicilio.
  • Que el cuidador no presente ningún grado de dependencia
  • Si el beneficiario está en un entorno rural, el cuidador podrá vivir en otro domicilio y no ser familiar, solamente si en la población del beneficiario no hay prestación alguna de servicios públicos o privados.
  • Si el beneficiario ya recibiera servicios antes de solicitar las prestaciones, se otorgarán ayudas para mantener los mismos servicios siempre y cuando sean compatibles con la prestación económica de cuidados en el entorno familiar

Restringir las ayudas económicas obedece a la necesidad de enfocar bien el gasto de los recursos, pero también pone de manifiesto que adicionalmente a los retos en gestión y cobertura, también hay un reto de financiamiento. Por ejemplo, ese es el caso del contexto en Castilla y La Mancha, donde el consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata afirmó que el costo real de la Ley sobrepasa la financiación prevista por el Gobierno; Lamata dijo que le dolía que se criticase a Castilla-La Mancha por su endeudamiento, cuando se ha hecho para poder cumplir con la ley de Dependencia.
Este año, gracias a la entrada del grado I nivel 2 se destaca el servicio de "promoción a la autonomía". Promocionar la autonomía quiere decir ayudar a mantener la capacidad personal de controlar, afrontar y tomar decisiones de cómo vivir haciendo uso de los recursos, las normas y la propia personalidad. En este servicio están incluidas las siguientes ayudas: habilitación y terapia ocupacional, atención temprana, estimulación cognitiva, promoción, mantenimiento y recuperación de la autonomía funcional, habilitación psicosocial para personas con enfermedad mental o discapacidad intelectual y apoyos personales y cuidados en viviendas tuteladas. Su sentido es mejorar la calidad de vida de los grandes de pendientes y prevenir los grados de dependencia severa. Este apartado se incentivará cada vez más debido a la necesidad de ayudar a la población a mantener la mayor autonomía posible durante los años y a su carácter preventivo.

domingo, 9 de enero de 2011

Ancian@s, ¿un negocio redondo?

Para muchos una oportunidad de mostrarse hacia los demás, dando todo su afecto y cariño, con sus cuidados y atenciones, profesionales de la sanidad , voluntarios y cuidadores.
Y por otro lado, empresarios con ánimo de lucro que ven a las personas como números y estadísticas, gentes que pierden la consciencia de la razón y lo humano, marionetas de gobiernos locales, autonómicos y estatal.
Centros, residencias, asilos.... utopía de valores conservacionales que camuflan un amasijo de intereses económicos.
¿ Cuándo deja de ser una vocación y se transforma en un negocio?
¿Son los mismos gobiernos los que con sus exigencias, transforman estos centros en una cuenta de haber y deber?
¿O siempre hay un trasfondo en la creación de centros a cajas resonantes registradoras?
Lo desconzco,aunque siempre es el profesional quien debe permanecer por encima de esos juicios y dar ese toque cálido y humano, que hace parecer de este circo un mundo afable y tierno.